William Cooper

Pero en lugar de esperar a averiguar las preferencias de las nuevas generaciones, Sony se ha preguntado qué es lo que seguimos valorando de la televisión y por ello, la división Professional Solutions Europe de la compañía japonesa nos proporciona una perspectiva independiente de nuestra relación con la televisión, que ha llevado a cabo el Dr. William Cooper, director ejecutivo de la consultora Informitv, tras explorar lo que entendemos y lo que significa para nosotros la televisión.

“A menudo escuchamos que queremos ver lo que queremos, cuando queremos, donde queramos”, dice Cooper.

“La consecuencia lógica de esto es que habitualmente solemos mirar la televisión solos. Sin embargo, todavía valoramos la experiencia de visualización compartida. Realmente tenemos muchas ganas de ver los mismos programas que los demás, lo que no queremos, es hacerlo a la vez”.

Ante ello, el informe sugiere que las nuevas formas de observación deben ser vistas como una oportunidad más que una amenaza. En todo caso, el consumo de vídeo en general es probable que aumente.

“Puede parecer obvio por qué vemos la televisión, pero las razones subyacentes son mucho más complejas. Tenemos que entender por qué la vemos hoy en día para así poder anticiparnos sobre cómo esto puede cambiar y lo que eso puede significar para cualquier persona involucrada en la industria de los medios de comunicación”, dice Niall Duffy, director de TI y de flujo de trabajo de Soluciones en Sony.

“Encargamos este trabajo para alentar e informar un debate sobre cómo la televisión va a evolucionar en un mundo conectado a la red”.

El informe ¿Por qué vemos la televisión? sostiene que poderosos factores sociales y psicológicos conducen a la experiencia visual. Comprender cómo y por qué las personas escogen ver la televisión nos ayudará a formarnos una idea del futuro de los vídeos online. Para acceder al informe pulse en este enlace.

Sony tiene una larga tradición en el apoyo a la industria de la televisión y el vídeo a través de la transformación y la innovación tecnológica. Para adaptarse a las cambiantes expectativas de los usuarios, medios de comunicación y empresas de comunicación necesitarán nuevos flujos de trabajo, los nuevos modelos de distribución, y una nueva manera de pensar acerca de las diversas necesidades de los usuarios y espectadores individuales.