Fueron, según ellos mismos defienden, la primera experiencia de outsourcing real en España. Ahora, Rural Servicios Informáticos vuelve a presentarse como precursora en el ámbito de las TIs al abrazar el modelo SOA como un elemento diferenciador de su funcionamiento y servicio.

Creada en 1986 por un reducido grupo de Cajas Rurales como un servicio externo y centralizado de explotación de datos, Rural Servicios Informáticos (RSI) es el claro ejemplo de las economías de escala y de que el popular dicho "la unión hace la fuerza" esconde una gran verdad. "En aquel momento, las cajas rurales se enfrentaban a un incremento imparable y muy elevado de los costes de desarrollo de software. Y como al final cuesta lo mismo desarrollar una aplicación de préstamos para una caja pequeña que una para el mayor banco de España, decidieron desarrollar esa aplicación pero no para que únicamente la pudiera utilizar una caja en concreto, sino todas", explica Carlos Moradell, director general de RSI.

Con esa idea y bajo el amparo del Banco de Crédito Agrícola, un total de 49 cajas rurales fundaba Rural Informática SA (más tarde RSI), una entidad que ha sabido crecer tanto en el número de miembros (actualmente, ya alcanza las 74 cajas) como en el abanico de servicios ofertados. "Ahora tenemos 74 cajas y un grupo de ocho bancos y cooperativas que, aunque no son socios, también reciben nuestros servicios. El modelo de negocio que seguimos es, en cierto modo, muy similar al que ofrece un gran almacén: yo te lo puedo dar muy barato porque ya lo tengo hecho, pero tienes que coger lo que yo ya tengo hecho para mis socios; lo que no puedo es hacerte un traje a medida", explica gráficamente Moradell.

Un modelo que aprovecha precisamente la que es su esencia: la economía de escala. Sus ventajas, tan variadas como significativas: reducción de costes, un trato más fácil con los grandes proveedores ("no es lo mismo que acuda una pequeña caja rural a negociar su contrato de suministro con Iberdrola que lo hagan 74") y la globalidad de servicios para todos nuestros clientes ("como todas las cajas están todas conectadas al sistema, todas las oficinas de cualquiera de nuestros 74 miembros están al servicio de cada cliente, de cada caja. Así, si tú eres de Granada y vas a Asturias con tu libreta de ahorro y tu carné, puedes trabajar en cualquier caja de ahorros como si estuvieras en Granada, con los mismos servicios y prestaciones"). "El modelo por tanto, y basándonos en hechos objetivos, funciona, es acertado y de hecho, crece. Porque al final de lo que se trata es de compartir unos gastos que todos tenemos que asumir por igual", señala el director general de la compañía.

AGROS, un ambicioso proyecto

Uno de los grandes hitos en la historia de RSI lo constituye el desarrollo de IRIS, el sistema de gestión bancaria que, junto a IBM, se ponía en funcionamiento en el año 1998. "Ha sido un sistema muy eficaz, que ha dado muy buen resultado y que ha cosechado grandes éxitos. Pero ha llegado el momento de renovarlo. De ahí el proyecto AGROS (Arquitectura Grupo Rural Orientada a Servicios), que tiene como principal cometido la renovación de IRIS para adaptarlo a tecnologías más avanzadas, basadas en estándares abiertos", apunta Carlos Moradell.

Concretamente, AGROS significa un cambio de arquitectura hacia estándares SOA, una iniciativa que supondrá la independencia del software de aplicaciones respecto al hardware y al software y que "tendrá como consecuencia una importante reducción en los costes, especialmente en los derivados de las licencias", afirma Moradell quien además asegura el papel como pionera que ha protagonizado RSI con esta decisión. "Yo creo que en el sector financiero, hemos sido los primeros en adoptar SOA; en otros sectores, puede que no; de hecho, Carrefour lo hizo hace un par de años aunque no migró sus sistemas críticos sino únicamente los datos de gestión".

Pero para el director general de RSI antes de decidirse a abordar SOA, lo primero y esencial es analizar qué beneficios va a aportar. "Hay dos ventajas fundamentales: el ahorro de costes y que independiza el software del proveedor, cosa que hasta ahora no ocurría. Al final, en España hay tres proveedores como aquel que dice: IBM, el único que está en sistemas grandes; y en sistemas medios y pequeños, IBM, HP y Sun Microsystems. No hay más. Y cuando decides casarte con un proveedor, es un matrimonio para muchos años en el que conseguir el divorcio es muy difícil y muy caro". De forma paulatina y en apenas dos años, el nuevo modelo estaría funcionando, si se cumplen las previsiones de RSI. "Es un proceso muy ambicioso y que vamos a acometer de forma muy transparente, migrando transacciones de forma paulatina. Mantendremos el concepto de mainframe, no queremos ir a granjas de servidores, pero dentro de este entorno, nos vamos a posicionar en los nuevos procesadores que ofrece IBM con Linux, concretamente con Z-Linux. Vamos a apostar por los sistemas abiertos. Por lo que respecta al código, vamos a pasar de Cobol a Java, una labor en la que IBM nos está ayudando a elaborar un capacity planning ya que no sabemos cuántos procesadores más tendremos que instalar al realizar este cambio, etc."

IBM vuelve por tanto a ser el compañero elegido por RSI en esta nueva travesía a la innovación tecnológica, una decisión que, entre otros motivos, se basa en la buena relación que mantienen ambas compañías. "Trabajamos con ellos desde hace veinte años, los conocemos bien y nos sentimos más seguros en IBM que en otros entornos. Además, en todo este tiempo nunca ha habido un problema técnico significativo. Es una sólida solución".

Una nueva aventura en la que RSI se equipara a los más grandes bancos y entidades financieras del mercado. "Todos estamos en el mismo barco; en TIs no nos diferenciamos demasiado de los grandes. Todos vamos hacia los sistemas abiertos, estamos destinando grandes inversiones a la Banca por Internet, etc".

El valor de una infraestructura de comunicaciones avanzada

Junto al proyecto AGROS, RSI muestra también su vocación innovadora en el propio diseño de su red de comunicaciones. La compañía cuenta así con dos enlaces ATM de 34 Mbps, contra centrales de Telefónica. Cada uno de ellos finaliza en un nodo Passport situado en RSI, lo que facilita el despliegue interno en múltiples líneas.

Los principales servicios asociados a estas conexiones son: conexión redundante del 60 por ciento de las oficinas del Grupo Caja Rural a RSI mediante redes Frame Relay o MPLSM; conexión redundante de 10 Mbps y alta fiabilidad a Internet, y entrega del tráfico X.25, un 25 por ciento conectadas mediante dos líneas redundantes de 45 Mbps a través del operador BT y el 15 por ciento restante, mediante otras dos líneas más de 34 Mbps, a través de Ono.

De cara al futuro, RSI maneja para sus redes LAN y WAN la posibilidad de que el único tráfico cursado sea IP y que el sistema de transporte de las redes sea TCP/IP puro.