Propone ideas, lidera proyectos, conoce la estrategia global del negocio. El director de tecnología o CIO ha ido tomando peso dentro de las compañías de todo el mundo y tamaño para, hoy, ser una pieza clave de la estrategia de las mismas.
Esa es una de las principales conclusiones de 2008 CIO Leadership, el estudio realizado por el Centro para el liderazgo del CIO, del queIBM es socio fundador.

Este informe desvela cómo actualmente los CIOs y sus equipos se encuentran más alineados que nunca con los objetivos claves de sus consejeros delegados y de otros altos ejecutivos. De hecho, nunca habían estado, de acuerdo con el Centro para el liderazgo del CIO, mejor posicionados para impulsar el crecimiento y el cambio de sus empresas.

Aún así, el camino que queda por recorrer es largo ya que, como señala también el informe, aunque la mayoría de los CIOs pertenece al comité de dirección y un 87 por ciento de ellos dice tener sólidas relaciones con el resto de ejecutivos, todavía no se aprovecha del todo esa oportunidad ya que únicamente el 67 por ciento es participante activo en el desarrollo de la estrategia de negocio.

Concretamente y aunque estos profesionales están situándose como líderes de innovación, aunque menos de dos tercios de los encuestados (el 63 por ciento) ha conseguido obtener los recursos necesarios al identificar oportunidades de innovación en el negocio mediante la utilización de tecnología. Esto indica que los CIOs están aportando sus ideas al comité, pero tienen como reto su contribución en la ejecución de esas iniciativas de innovación.

A pesar de ello, lo que es evidente es que cada vez el CIO juega un papel más relevante como líder e impulsor del cambio. De hecho, el 85 por ciento lidera iniciativas para dotar a la organización de flexibilidad para abordar el cambio. En cuanto a su reconocimiento como líderes en sus compañías, el 91 por ciento de los encuestados por el Centro para el liderazgo del CIO declara tener una visión clara de cómo las tecnologías hacen avanzar el negocio y el 90 por ciento afirma liderar e influir sobre otros, incluso sin tener autorización formal para ello.

Sin embargo, aún son algunos los obstáculos que también existen en este terreno y así los CIOS señalan que tienen dificultades para poder delegar y construir equipos de última generación. El 93 por ciento de los encuestados tiene claro cuáles son las aptitudes críticas que necesitan tener los integrantes de su equipo, pero luego sólo el 64 por ciento de ellos tiene un plan de desarrollo y captación de talento. Asimismo, sólo el 69 por ciento de los directores reconoce que ha desarrollado un proceso de delegación de autoridad que le permita dedicar más tiempo a definir la estrategia.

“Los resultados del estudio 2008 CIO Leadership confirman que actualmente el puesto de CIO está consolidado, pero hay que seguir trabajando. El CIO es el único ejecutivo que tiene una visión de principio a fin de los procesos globales del negocio, siendo por tanto el directivo que mejor está posicionado para pasar de tener un papel como implantador de tecnología a convertirse en asesor estratégico del negocio", afirma Harvey Koeppel, director ejecutivo del Centro para el liderazgo del CIO. “Los CIOs están ahora mejor posicionados que nunca para liderar y las empresas nunca han estado tan receptivas al tipo de mejoras transformadoras que la función del director de tecnología puede llevar a cabo”.